Cómo limpiar joyas de oro, plata y demás materiales

El mantenimiento de nuestras piezas de joyería es una materia que en muchos casos queda olvidada y puesta en un segundo plano. Es un error que se comete bien por dejadez o bien por ignorancia, pero, en cualquier caso, debemos saber que las joyas se deben cuidar regularmente y en este sentido, saber cómo limpiar joyas de oro, plata o de otros materiales va a ser fundamental en tal cometido.

El paso del tiempo y el uso continuado exponen a las joyas a todo tipo de condiciones, ambientes y componentes nocivos (suciedad) que se adhieren a las piezas y les hacen perder su color y su brillo. Por eso la importancia de saber cómo limpiarlas para que siempre luzcan como nuevas.

Vamos con algunos consejos de Boxpack para que vuestros artículos estén siempre como el primer día.

Cómo limpiar joyas de oro

Las joyas de oro amarillo son las más habituales, pero en los últimos años el oro blanco ha ganado mucha cuota de aceptabilidad entre las usuarias/os. También existen piezas de oro rosa (con cobre), oro verde (mezcla de oro y plata), oro azul (aleación con hierro) y oro rojo (oro amarillo más cobre), por nombrar algunas. Pero la mayoría de joyas de oro que veremos serán de los dos primeros tipos que hemos mencionado.

Aunque el oro es un metal resistente a las inclemencias y a la oxidación propia de las condiciones meteorológicas y el transcurrir del tiempo, se ensucia y se desgasta. En materia de limpieza y mantenimiento, en el caso de los artículos hechos de oro o de aleaciones con este mineral precioso, bastaría con utilizar un paño y un cepillo de dientes o similar (para la suciedad más incrustada) y agua templada y jabón neutro diluido.

El ejercicio de limpiar nuestros artículos de joyería no encierra mucho misterio. En el caso de las piezas de oro:

• Mezclar en un bol o recipiente cualquiera, el agua y el jabón, y dejar diluir durante 10’ (si cubrís el recipiente previamente con papel de aluminio, mejor).
• Utilizar el cepillo o instrumento con cerdas apropiadas para limpieza de objetos haciendo movimientos circulares y tratando de llegar a todos los puntos críticos.
• Con agua caliente, retirar la suciedad restante y a continuación, secar con el paño o en su defecto con papel de cocina.

Pero no es la única combinación de elementos válido para aprender a cómo limpiar joyas de oro. También se consigue un resultado óptimo empleando:

• Con sal y limón (empapar un paño con la mezcla y limpiar) (también funciona añadiendo bicarbonato de sodio a la mezcla).
• Con bicarbonato de sodio (aplicar sobre las joyas hasta cubrirlas, dejar actuar unos minutos, hervirlas en un cazo, enjuagar con agua fría y secar con paño).
• Con vinagre y bicarbonato de sodio (mezclar bicarbonato y agua y aplicar la solución sobre las piezas, para introducirlas luego en un recipiente donde las cubriremos con vinagre, y terminar enjuagándolas con agua y secando con un paño).
• Pasta de dientes para el oro blanco (aplicar en las piezas y con un cepillo de dientes limpiar, luego enjuagar y secar).
• Licuando una cebolla para sacar zumo (introducir las piezas en un recipiente con el líquido, dejar actuar en torno a hora y media, sacar, enjuagar con agua y jabón, y secar).

Decir que hay que tener mucho cuidado y fijarnos bien si limpiamos las joyas con bicarbonato y/o sal. Lo decimos porque, en ocasiones, puede que se incrusten partículas en los recovecos de la pieza, entre la piedra y el resto de la joya.

Cómo limpiar joyas de plata

Hay que estar regularmente más encima de nuestros artículos de plata porque es un material que se oxida más fácilmente que otros materiales en su exposición al oxígeno, por ejemplo. Pero no os preocupéis porque con un simple paño de algodón, agua templada y jabón, podemos ir limpiándolas con frecuencia y por tanto mantenerlas en buen estado durante toda su vida útil.

Si hemos sido descuidadas/os y hemos dejado que las piezas cojan un color negro por la suciedad y la oxidación, debemos emplear otros métodos más intensos para su limpieza:

• Emplear bicarbonato de sodio, agua templada y luego secar con un trapo de algodón.

Olvidarse de productos químicos ajenos a los que hemos comentado en el post, como sería el amoniaco o incluso compuestos preparados específicamente para limpiar oro o plata. Dañarán las piezas a corto plazo irremisiblemente. Incluso los algodones ya preparados para la limpieza de plata o alpaca no son muy recomendables. Si se usan, luego remojar las joyas con agua y jabón para eliminar los residuos químicos que hayan podido permanecer.

Limpieza de otros materiales

Nos referimos a artículos como diamantes o perlas, que tienen sus particularidades propias y debemos conocerlas para luego llevar un más adecuado mantenimiento de las joyas.

En lo que se refiere a los diamantes, el cuidado ha de ser extremo. Son piedras preciosas únicas donde su habitual fluorescencia les permite (según su grado luminosidad) brillar y reflejar la luz de manera excepcional.

Para su limpieza, optar por:

• Agua tibia, no caliente.
• Amoniaco

Se mezclan en un recipiente (3/4 partes agua tibia y el resto amoniaco) y tras dejar pasar unos minutos, limpiar la pieza o piezas con un cepillo de dientes (cerdas blandas, usadas).

En cuanto a las piezas con perlas en ellas, deberemos dejar de lado la mayoría de elementos que hemos mencionado en el post. Las perlas no toleran los componentes químicos y pueden dañarlas irremediablemente. Ello nos lleva a utilizar para su limpieza tan sólo un paño de algodón, que lo pasaremos cada pocos días de uso de las joyas. Como mucho, humedecer algo el paño si hay suciedad que se resiste a desaparecer. Un paño húmedo de agua templada mezclada con jabón de ph neutro.

Conclusiones

Aprender a cómo limpiar las joyas de oro, plata u otros materiales es fácil y está al alcance de todas/os. Como veis, hay diferentes formas de conseguir que nuestras piezas estén radiantes y como nuevas.

Os hemos mencionado las más convencionales, pero hay incluso más maneras que incluyen por ejemplo kétchup o maquillaje líquido 🙂 y que además de limpiar, pulen las piezas con resultados excelentes.

Debemos cuidar y limpiar regularmente nuestras joyas y artículos de bisutería para alargarles la vida útil y para que siempre luzcan bien y bonitas.