Joyas de reyes
La relación histórica entre las joyas y los reyes es profunda y con un marcado componente cultural y religioso. Símbolos de poder, estatus y riqueza, principalmente, y con influencia más allá de las cortes en esferas como la moda, la política o la diplomacia, por ejemplo.
La Corona Real española no destaca especialmente por tener una colección de joyas de reyes ni copiosa ni especialmente valiosa, aunque sí que hablaremos de una pieza en concreto que está entre las 30 más valiosas del orbe.
Joyas de reyes destacadas
Se haría interminable el listado de joyas preciosas destacadas a lo largo de los siglos de reinados de las diferentes familias reales y monarquías en el mundo. Pero sí que queremos sacar a relucir algunas de ellas en los últimos siglos XIX, XX y XXI, donde tenemos varias joyas de reyes que han destacado por su belleza, valor histórico y simbolismo. Aquí hay algunos ejemplos notables:
Siglo XIX
Corona Imperial de Francia: La Corona Imperial de Francia, creada en 1804 para la coronación de Napoleón Bonaparte, es un ejemplo icónico de joyería real del siglo XIX. Está decorada con cerca de 1.800 diamantes y esmeraldas, y se considera una de las coronas más emblemáticas de la época.
En España, salto a la primera plana de los medios de la época, el tesoro de Guarrazar, un conjunto de joyas visigodas, datadas en el siglo VIII, cuando los musulmanes invadieron la península ibérica. Lo descubrieron una pareja de lugareños y se compuso de dos lotes de piezas en las que destacaban las coronas de oro con engastes de perlas y gamas, entre otras preciadísimas piezas de orfebrería.
Estudios posteriores concluyeron que varias de las esmeraldas y los zafiros que formaban parte del conjunto de joyas encontradas en Guarrazar, Toledo, procedían de parajes tan lejanos como Sri Lanka o Austria. Estas joyas de reyes encontradas en el siglo XIX tuvieron su continuación con el descubrimiento de otras joyas de origen visigodo en el pueblo jienense de Torredonjimeno, ya en pleno siglo XX.
Siglo XX
El collar de perlas de la Reina María: El collar de perlas de la Reina María, madre de la Reina Isabel II, es una pieza de joyería clásica del siglo XX. Fue hecho con perlas obtenidas por la Reina María y ha sido usado por varias generaciones de la realeza británica.
La tiara cartier de la Reina Isabel II: Esta tiara, creada por Cartier en 1936, se convirtió en una de las favoritas de la Reina Isabel II. Es una pieza de joyería icónica que ha sido usada en numerosas ocasiones y eventos formales.
Corona del Duque de Edimburgo: La Corona del Duque de Edimburgo es un ejemplo de la joyería masculina real del siglo XX. El príncipe Felipe, Duque de Edimburgo, lució esta corona en eventos y ocasiones oficiales.
Siglo XXI
El anillo de compromiso de Kate Middleton: El anillo de compromiso que el Príncipe Guillermo le dio a Kate Middleton en 2010 es una pieza icónica del siglo XXI. El anillo tiene un zafiro de Ceylán rodeado de diamantes, y es una pieza de joyería que se ha vuelto muy famosa en todo el mundo.
Tiara rusa de la Reina Máxima de los Países Bajos: La Reina Máxima de los Países Bajos ha lucido la Tiara Rusa en varias ocasiones desde que se convirtió en reina consorte en 2013. Esta tiara tiene un diseño impresionante con diamantes y esmeraldas.
El collar de corales de la Reina Margarita II de Dinamarca: La Reina Margarita II de Dinamarca a menudo luce un collar de corales de gran valor histórico y sentimental. El collar ha sido usado por varias generaciones de la familia real danesa.
Otros descubrimientos en España
Tesoro de la Fragata Nuestra Señora de las Mercedes (2007)
Uno de los descubrimientos más significativos en la historia de la recuperación de tesoros, en 2007 se encontraron valiosas joyas y monedas en el naufragio de la fragata Nuestra Señora de las Mercedes, un barco de guerra español que se hundió en 1804. Entre los objetos recuperados se encontraron monedas, joyas y objetos personales que habían pertenecido a la nobleza y la alta sociedad de la época, incluidas piezas de la corona española.
La Joya del Duque de Alba
En el siglo XVII, el Duque de Alba, uno de los hombres más poderosos de España, poseía una impresionante colección de joyas. Si bien estas joyas no se descubrieron en el sentido tradicional, su colección histórica incluía muchas piezas notables.
Las Joyas de Carlos IV
En el siglo XVIII, la monarquía española era conocida por su riqueza y lujo. El rey Carlos IV y su esposa, la reina María Luisa, poseían numerosas joyas, incluidos collares, pendientes y tiaras. Estas joyas se utilizaron en ocasiones ceremoniales y retratos reales.
El Tesoro de Marbella (1822)
En 1822, se encontró el Tesoro de Marbella, que incluía una variedad de objetos de valor, como monedas de oro, joyas y piezas de plata. Aunque no estaba directamente relacionado con la realeza, este tesoro es un ejemplo de hallazgos de objetos de valor en España durante el siglo XIX.
Joyas de la Corona Española
Gran parte de las piezas que componen el ajuar de la Casa Real española fueron amasadas por la reina Victoria Eugenia, nieta de la reina Victoria de Reino Unido, y que durante su matrimonio con el rey Alfonso XIII, hizo diseñar multitud de joyas de gran valor como representación de su unión.
Fue ella la que en 1963 estableció la regla de que las joyas reales no perteneciesen a nadie a título personal, y fuesen “pasadas” de monarca en monarca, es decir, que estén vinculadas al jefe de la Casa Real. Es por eso que hoy vemos muchas de ellas vigentes en los looks y atuendos de la reina Letizia en sus diferentes actos instituciones (los más importantes).
Entre toda esta colección de joyas (ni mucho menos tan abundante y valiosa como la de otras casas reales), destacamos las diferentes tiaras que porta la reina en esas ocasiones especiales de las que hablamos:
- Tiara de la Flor de Lis: Con la flor de Lis, emblema del linaje borbónico.
- Tiara Rusa: Regalo de boda de Alfonso XIII a su nuera María de las Mercedes en el año 1935. La integran perlas y diamantes, y está hecha de platino.
- Tiara Floral: Regalo del general Franco a los reyes eméritos.
- Tiara Ansorena: También con la flor de lis en su zona central.
- Tiara Prusiana: La que la reina Letizia portó el día de su boda, y que fue cedida por la reina Sofía.
- Tiara Mellerio: Perlas, diamantes y brillantes coronan una pieza distinguida del siglo XIX.
- Tiara Cartier: Del ajuar de la reina Victoria Eugenia. De diamantes y perlas.
Collar más valioso
Pero ninguna de estas tiaras de la Casa Real es la más valiosa en su composición (y por tanto, económicamente). Ese simbólico galardón se lo lleva un collar de rubíes, esmeraldas, zafiros y diamantes que posee la infanta Elena.
Fue un regalo de boda (de su matrimonio con Jaime de Marichalar en 1995) y está valorado en 3,5 millones de euros.
Componentes de una vinculación histórica y simbólica
Las joyas, especialmente las que están adornadas con piedras preciosas y metales preciosos, se han considerado símbolos de poder, estatus y riqueza a lo largo de la historia. No es de extrañar, entonces, que reyes y monarcas de todos los rincones del mundo se hayan sentido atraídos por su valor y simbolismo. Su uso les ha servido (y les sirve) para presumir de posición en la sociedad y de su autoridad.
Sabiendo como es sabido, que usar joyas lujosas y ostentosas era una forma de mostrar la riqueza y el poder de un rey ante su corte y su pueblo (esto no solo se aplicaba a las joyas personales, sino también a las joyas de la corona y las que pertenecían al tesoro real), las alianzas de boda y las joyas relacionadas con bodas siempre han sido y son las más selectas. Teniendo en cuenta que monarquía y religión van de la mano, no es extraño que se haga gala de las más elegantes y valiosas joyas de reyes en los enlaces reales.
Herencia, diplomacia y religión
Las familias reales suelen disponer de ajuares específicos destinados, cuando la tradición y el protocolo así lo sugieren, como regalos en relaciones diplomáticas y políticas. En ocasiones muy contadas, todo sea dicho, pero el regalar joyas se ha dado muy comúnmente en encuentros entre monarcas o altos representantes de la política.
No se ofrecen en estos contextos concretos y puntuales piezas de colecciones de artículos de joyería heredadas de generación en generación. Estas joyas son, de hecho, las más valiosas simbólica y económicamente de todo el ajuar de una casa real. Son generalmente las que se visten en eventos y ocasiones especiales y se guardan casi que como tesoros reales altamente custodiados, propiedad de la monarquía y, por extensión, del Estado.
Por último, ya lo hemos comentado, destacar que las joyas de reyes tienen un profundo significado religioso y cultural. Un ejemplo: las coronas reales que se dice que simbolizan la autoridad divina del monarca.
Coronas reales
Y hablando de coronas reales, son, sin duda, las piezas que más sobresalen por encima de cualquier otra en todo ajuar real. Son, quizás, el ejemplo más icónico de joyería usada por reyes y reinas. Estas coronas están decoradas con gemas preciosas y metales preciosos y se usan en ceremonias de coronación y ocasiones ceremoniales importantes.
Un ornamento que desde siempre se ha erigido como símbolo de grandeza, poder y autoridad por reyes y religiosos de siglos pasados y también recientes. España, sin ir más lejos, país monárquico, tenemos la corona real en nuestro escudo y el objeto real, creado en el año 1775, forma parte, como no podía ser de otra manera, del Patrimonio Nacional.
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Corona real británica
Posiblemente, la más distinguida de las coronas reales europeas. La monarquía británica siempre ha destacado por presumir y mostrar sin tapujos opulencia y magnificencia en cada uno de los eventos públicos que ha protagonizado en las últimas décadas. Como el funeral de la reina Isabel II o la posterior coronación de su hijo, el nuevo rey Carlos III.
La corona real, confeccionada en oro y cubierta por piedras preciosas (topacios, citrinos, amatistas, zafiros y turmalinas) también incluye perlas. Su valor económico, pues lo podéis imaginar, casi incalculable. Decenas de millones de euros.
Conclusiones
Joyas y reyes han estado vinculados y lo siguen estando desde el principio de las dinastías. En verdad, joyas y poder podríamos decir, es lo que siempre han estado vinculados, y siendo los monarcas jefes de Estado en la mayoría de casos, no nos extraña que algunas de las piezas preciosas más espectaculares de la historia pertenezcan o hayan pertenecido a reyes, reinas, príncipes o princesas.
Seguramente nunca irán estas piezas reales tan selectas en cajas de cartón para joyería como las que tenemos en Boxpack (igual de selectas para nosotros/as 😜), pero para el resto de joyas que podemos llevar las personas sin sangre azul, son sin duda la mejor opción en cualquier momento que se quiera comprar o regalar una joya 😉.